La ruda ha sido utilizada desde tiempos inmemoriales
para hacer rituales de magia y de encantamientos, se le ha reconocido
también propiedades curativas y medicinales.
Esta matica es bien especial y celosa, su manipulación debe hacerse
cuando estemos equilibrados y tranquilos especialmente cuando vamos a
plantarla en nuestro jardín, y colocarla en un lugar donde reciba el
sol.
La ruda es utilizada en rituales de protección, para limpiar de las malas energías
propias y ajenas, en nuestro negocio, se puede manejar para alejar
celos y envidias como resultado de nuestro trabajo, nos puede ayudar
para atraer el amor, incluso para deshacer conjuros o amarres que nos
hayan hecho. Como pueden ver esta planta tiene bastante poder y no es un
juego el utilizarla, debemos tener cuidado porque si no la tratamos con
delicadeza y respeto la moneda se nos puede voltear en contra nuestra.
Como podemos trabajarla para que nos sirva de protección?
Utilizo el término trabajarla porque eso es lo que debemos hacer para
nosotros. Debemos hacerla nuestra, como decía anteriormente la actitud
de respeto que tengamos es muy importante al momento de su manipulación.
Esta plantica ya sembrada o si preferimos comprarla en el mercado la
colocamos en un cuenco de madera y prendemos tres velas preferiblemente
blancas y las colocamos en triangulo frente al recipiente de madera, nos
sentamos frente a este y nos recogemos tranquilamente. Interiormente le
damos las gracias por su protección.
Podemos utilizarla para hacer sahumerios y su olor fuerte ayudara a
ahuyentar las energías negativas que se han aposentado ya sea en nuestro
hogar o en nuestro sitio de trabajo o negocio.
Para limpiarnos a nosotros, nos hacemos un baño con el agua de ruda,
no es necesario utilizar muchas hojas de esta planta con unas pocas es
suficiente. Este ritual no lo debemos hacer tomando sol, esto es muy
importante, ya que por el poder tan fuerte que tiene esta planta, puede
causarnos quemaduras y hacernos daño en nuestro cuerpo, en lugar de
obtener el beneficio que buscábamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario